La educación de los chicos está relacionada con su familia, su cultura, la sociedad en la que viven y la escuela. Todos estos aspectos influyen en la formación del individuo e interactúan de manera permanente. No se puede pensar que la escuela será la única instancia que formará a los niños y donde los padres no tengan que hacerlo. De hecho, entre mayor comunicación haya entre padres y escuela más se favorecerá el desarrollo y desempeño del pequeño. Existen diversas formas en las que los padres de familia pueden interactuar con el centro educativo, algunas de ellas favorecen la relación y el desarrollo del niño, otras tantas pueden llegar a entorpecerlo. A continuación se presentan una serie de puntos sobre conductas deseables y no deseables de los padres en la escuela.
Conductas deseables de padres de familia hacia la escuela:
- Contar con el nombre de sus profesores, tutores, director, etc. y datos de contacto por si se requiere.
- Conocer a los profesores del niño.
- Tener la información del calendario del colegio para estar atentos a fechas de juntas, entrega de calificaciones, viajes, asuetos, celebraciones, etc.
- Asistir a las juntas de padres de familia
- Solicitar entrevista con su maestra si se tiene alguna preocupación acerca de su hijo
- Participar en los eventos escolares (en la medida de lo posible)
- Si se desea, formar parte de la asociación de padres de familia (si la escuela cuenta con ella)
- Abordar en dirección solo asuntos cuya gravedad sea mayor y que el profesor o titular no hayan podido resolver.
- Conocer el reglamento escolar y apegarse a él (retardos, faltas, ausencias, justificantes, calificaciones, etc.)
- Atender a las recomendaciones de la escuela si sugiere que el niño asista a alguna evaluación, tratamiento, terapia, etc.
Conductas que pueden entorpecer la relación del padre de familia con la escuela así como el desempeño y desarrollo del niño:
- Sentirse con el derecho de opinar sobre todo lo relacionado a la escuela y emitir juicios de valor sin fundamento.
- Utilizar los medios de relación con otros padres de familia para generar campañas o boycotts hacia profesores o personal del colegio.
- Utilizar la asociación de padres de familia como medio para conseguir que la escuela se adapta a sus necesidades particulares (si se requieren adaptaciones especiales por salud, enfermedad, discapacidad, etc. se debería abordar directamente con dirección).
- Pasar tiempo de más en las instalaciones del colegio cuando no hay una actividad o evento asignado.
- No respetar las jerarquías. Es decir, si el niño tiene un problema con la maestra, en vez de resolverlo con la maestra primero, irse en primera instancia hasta dirección general para que les resuelvan el problema.
- Desprestigiar profesores o personal del colegio.
- Esparcir chismes o información cuya validez no se ha comprobado
- Ir a abogar por el niño en aspectos que el niño debe resolver por sí mismo
- Buscar modificar las políticas del colegio para acomodar los gustos y preferencias personales.
- No conocer a los profesores de su hijo
- No asistir a juntas de padres de familia
- Buscar que el reglamento se ajuste a la familia en vez de la familia al reglamento.
- Ignorar las recomendaciones o necesidad de apoyo para el niño que solicita la escuela.
- Querer negociar las calificaciones del niño con sus profesores
- Interactuar directamente con los compañeros del niño buscando defenderlo o resolver el problema que tuvo con alguno de ellos.
- Hacer venta de productos o servicios sin autorización del colegio
Es importante la participación de los padres de familia en la escuela, debe cuidarse que el compromiso no se transforme en intromisión. La escuela como institución está conformada por sus valores, creencias, misión, objetivos, así como su modelo educativo y personal a cargo. Si no se está de acuerdo con estos aspectos del colegio, lo más sano es buscar otra opción para el niño ya que resulta ilusorio pensar que la escuela será la que cambiará las formas para acomodarse a él.
Pueden surgir situaciones que haya que atender, reportar, denunciar, etc. En esos casos es necesario siempre contar con información fidedigna, conocer los pasos que hay que tomar y las personas a las cuales recurrir para abordar esos asuntos. La escuela es el espacio del niño, compartir sanamente con él ese espacio ayuda a la relación entre niño, familia y escuela, sin embargo cuando esta relación se daña, hay que recordar que el principal perjudicado es el pequeño.
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