Existen colegios que dejan tarea a los niños desde los primeros años escolares y conforme van cursando grado tras grado la carga de trabajo extra escolar muchas veces aumenta. Hay niños que incluso invierten cada tarde de 2 a 3 horas en promedio para hacer tarea. Actualmente hay una tendencia a tener las tardes llenas de actividades, hay pequeños en primaria que ya entrenan deporte hasta 3 horas diarias teniendo que llegar a casa por la noche todavía a continuar con la tarea para el siguiente día. Otros tantos están involucrados en tutorías, terapias, clases de idiomas, de música y un sin fin de actividades que ocupan cada momento de sus tardes.

El argumento de varios padres de familia es que necesitan tener ocupado al chico para evitar que esté en el celular, la computadora o simplemente haciendo vagancias. Hay papás que no toleran ver a los niños sin hacer nada porque creen que están perdiendo el tiempo o se van a meter en problemas. La realidad es que a los niños les está haciendo falta tiempo para el juego y el descanso. Algunos de ellos ni siquiera tienen tiempo para convivir con amigos. Pocos niños juegan ya libremente por las tardes, solamente aquellos que viven dentro de algún fraccionamiento o coto tienen mayor libertad para jugar en las áreas verdes de esas comunidades (si es que tienen tiempo), el resto difícilmente sale a la calle, busca al vecino u organiza un partido en su colonia.

Los pediatras cada vez atienden más niños con gastritis, urticarias, dolores de cabeza y un sin fin de síntomas relacionados con estrés. A su corta edad hay niños ya con ataques de ansiedad y depresión, medicados y con terapia para poder lidiar con la realidad lo mejor posible. Hay padres que quieren que sus hijos brillen y quieren que se aproveche su talento al máximo.  Por otro lado hay otros tantos que con las jornadas laborales que tienen, difícilmente tienen tiempo de pasar las tardes con los niños y para que no se queden solos en casa, la solución es tener agendas repletas que fungen como niñeras para que alguien más los cuide en lo que salen del trabajo.

Aunque la realidad complique el poder contar con este tiempo de juego y descanso, es necesario procurarlo ya que el juego es indispensable en la vida de los niños. Gracias a él desarrollan distintas habilidades como cooperación, negociación, creatividad, imaginación, habilidades emocionales, etc. Un niño que juega es un niño sano debido a que el juego le permite tener un equilibrio entre su desarrollo físico, emocional y social, fomenta la comunicación, la creatividad, el talento, la socialización y el desarrollo de la inteligencia emocional entre otras cosas.  El tiempo que pasan los niños jugando de ninguna forma es tiempo perdido, los videojuegos tampoco son malos si se utilizan con moderación. Lo importante es que el niño utilice su imaginación, conviva con otros y tenga libertad de movimiento. A continuación se mencionan algunos tipos de juegos que sirven a los niños y contribuyen a su desarrollo.

Tipos de juegos:

  • Físico: Es el tipo de juego que le permite poner en uso su cuerpo, desarrollar habilidades motoras y coordinación ojo-mano. Ayuda en su estado de salud y se utilizan distintos tipos de juguetes o juegos como bloques, bicicletas, patines, resbaladilla, columpios, areneros, las escondidas, carreritas, avioncito, etc.
  • De exploración o manipulación: Este tipo de juegos les permite conocer su entorno, los objetos y sus características. Les permite resolver problemas y generar estrategias. Ejemplos de este tipo de juegos son los rompecabezas, juguetes con los que puedan construir, pinturas, plastilina, barro, etc.
  • Con reglas: Este tipo de juegos comienzan a estar presentes a partir de los 6 años de edad donde los niños ya pueden seguir las reglas de un juego. Desde un juego deportivo (ej. una competencia de relevos, juego de futbol, etc.) hasta juegos de mesa, organizarse en equipos, realizar competencias de distinta naturaleza.
  • Simbólico (imaginación): Este tipo de juego comienza a partir de los 18 meses y permite a los niños utilizar su imaginación para interactuar con objetos de manera simbólica. Reconocen las emociones de otros y el impacto que generan sus acciones en los demás. Ejemplos de este tipo de juegos son jugar a la tiendita, hacer pasteles de lodo porque están cocinando, utilizar disfraces, dinero de juguete, teléfonos de juguete, jugar a la casita, etc.

Por medio del juego los niños aprenden a interactuar con otros, a tomar turnos, pedir permiso, reconocer al otro, expresar emociones, compartir, negociar, resolver problemas, entre otras cosas.  En edad preescolar es principalmente importante que los padres jueguen con los pequeños ya que esto ayuda  a reforzar el vínculo con sus hijos. La infancia es una etapa de vida que pasa con rapidez, tendrán toda su vida para ser adultos, para trabajar y estresarse, démosles permiso de disfrutar su niñez, ya habrá tiempo para todo.

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