Eva Millet (2016) acuña el término Hiperpaternidad refiriéndose a los padres y madres que están encima de los hijos, resolviéndoles los problemas, atiborrándolos de actividades extraescolares y anticipando incluso sus deseos. Parte de lo que ha llevado a la modificación en la crianza de los hijos ha sido el cambio en la estructura familiar. Hoy se cuenta con menos niños en casa, en la gran mayoría de las familias ambos padres trabajan y los hijos se han vuelto el centro de las familias ocasionando que todo gire a su alrededor.

Los hiperpadres quieren darle lo mejor de lo mejor a sus hijos, llámese experiencias, colegios, viajes, juguetes, etc. sin importar el costo que esto tenga. Las expectativas hacia sus hijos es que éstos tengan un futuro brillante como consecuencia de todo el tiempo y recursos invertidos en ellos. Los hiperpadres pueden tomar diversas formas, hay aquellos que procuran allanar el camino para que sus hijos no pasen por las mismas dificultades que a ellos les tocó pasar. Otros quienes se vuelven choferes llevándolos y trayéndolos a cuanta actividad extra escolar o social tengan agendadas. Existen también aquellos que se preocupan por tratar de evitar que cualquier cosa les pueda pasar (resfirarse, caerse, sufrir, quedarse con hambre, etc.).

¿Cuáles son los riesgos de la hiperpaternidad?

  • Hijos agotados por tener agendas repletas y un montón de estrés sobre los hombros por cargar con la expectativa de tener que ser perfectos o no desilusionar a los padres después de todo lo que invirtieron en ellos.
  • Madres en particular, agotadas por hacer todo por los niños, es decir, cargar con responsabilidades que les tocan a los hijos pero deciden hacerlas ellas (ej. preparar la mochila, recoger su cuarto, alistar el uniforme, etc.)
  • Se inutiliza a los niños tanto en lo emocional como en aspectos básicos de vida ya que con tanto control y seguimiento se les manda el mensaje de que son incapaces de hacerlo solos. Se les impide aprender de sus errores ya que no se equivocan (gracias a mamá o papá quienes están ahí siempre para impedirlo).
  • Se gestan niños que se sienten con derecho a todo (sin haber hecho nada). Pequeños emperadores que quieren que el mundo esté a su servicio y los atienda. Estos niños en la adolescencia experimentan trastornos de ansiedad, depresión, trastornos psicosomáticos y comienzan a consumir sustancias que afectan su salud (etc. Alcohol, tabaco,drogas). En un intento por sentir y por querer tener un aparente control de su vida, pueden llegar a caer en adicciones.

El rol de los padres es criar hijos en un ambiente tranquilo, seguro y afectuoso, sin la necesidad de competir con otros padres o añadir estrés innecesario a los pequeños. Cosas esenciales como poder disfrutar un paseo, tomar una siesta, comer sin prisas, tener tiempo para jugar, son las cosas que los niños necesitan. No se les puede envolver en algodones y si bien es el rol del adulto cuidar a los pequeños, este cuidado no debe exceder el objetivo principal que tiene: preservar  su integridad física, psicológica y moral. Los niños son niños, tendrán cada etapa de su vida para descubrir qué quieren, qué les gusta, qué les cuesta trabajo, pero no podrán hacerlos si se les corrige la plana y se les allana el camino sin permitirles hacerlo por ellos mismos.

Imagen:  <a href=»https://www.freepik.es/fotos-vectores-gratis/personas»>Foto de personas creado por freepik – www.freepik.es</a>